Así lo plantea Constanza Miriano, una italiana que se le ocurrió escribir en nombre de la Fe una serie de consejos que vienen muy bien en este momento en que millones de mujeres luchan contra la violencia machista. Esta señora, muy católica y amante de las tradiciones, aconseja a sus pares que deben elegir la estrategia de la sumisión en el matrimonio. Cada palabra, gesto u opinión del pater familias es casi como la palabra de dios, aunque un poco más devaluada, claro.
Veamos algunos de sus sabios consejos para que la mujer conserve la salud y los huesos sanos, o en el peor de los casos, no caiga sobre su cabeza el poderoso rayo divino.
“¿Alguna sabe que se puede ser feliz incluso con su marido? Pregunta astutamente la autora, cerrándole probablemente la puerta a la tentación del divorcio o del amante. Ahora es el momento de aprender la obediencia leal y generosa, la sumisión. Y, entre nosotras, podemos decirlo: debajo siempre se coloca el que es más sólido y resistente, porque quien está debajo sostiene el mundo”, o sea a nosotros los hombres, pobres desvalidos, que sin una mujer sumisa a nuestro lado nos perderíamos irremediablemente camino del infierno.
Así es amigas, la solidez de vuestros hombros sostiene hasta un elefante, decía uno de los antiguos profetas. Lo más estimulante es que el arzobispo de Granada, Javier Martínez, ha financiado la traducción del libro al castellano y su publicación en España con un precio de venta de 16 euros benditos. "Esposas, estad sujetas a vuestros maridos" habría afirmado San Pablo a los habitantes de Éfesos, según los escritos sagrados y citado muchas veces por contritos autores más modernos y no tan devotos historiadores. Según la prensa local andaluza que ha criticado duramente al arzobispo
Martínez, este habría comparado la Ley del Aborto y el régimen de Hitler, asegurando que “los crímenes nazis no eran tan repugnantes” como los que permite cometer la ley del aborto en España. Bueno, si el arzobispo, que ha abrazado la doctrina del amor predicada por Jesús sin excepciones, incluso por los pecadores, es capaz de expresarse así, no podemos dudar de su buena fe cuando se apresuró a que se publicara el libro de la señora Miriano.
Pero sigamos con alguna cita más de esta prodigiosa obra, inspirada seguramente por algún rayo divino, en esta ocasión benévolo.
Bueno, como botón de muestra creo que basta. Según los que han han leído todo el libro los consejos son todos en este tono, sin pausa, en una demostración ejemplar de los deberes de la mujer con respecto a su familia, y en particular hacia su marido. En Italia se dice que lidera el récord de ventas. En un país como España, con unas 60-70 mujeres asesinadas por sus maridos o sus parejas cada año según cifras oficiales, estos sabios consejos seguramente que aplacarán a los lobos que se convertirán en corderitos apenas sus mujeres hayan leído la obra. Ah! Y no olvidéis de introducir el libro en las escuelas, así las niñas van aprendiendo cual es la conducta a seguir en el futuro. Les ahorrará una serie de golpes propinados por el rayo divino de la ira del santo .
Veamos algunos de sus sabios consejos para que la mujer conserve la salud y los huesos sanos, o en el peor de los casos, no caiga sobre su cabeza el poderoso rayo divino.
“¿Alguna sabe que se puede ser feliz incluso con su marido? Pregunta astutamente la autora, cerrándole probablemente la puerta a la tentación del divorcio o del amante. Ahora es el momento de aprender la obediencia leal y generosa, la sumisión. Y, entre nosotras, podemos decirlo: debajo siempre se coloca el que es más sólido y resistente, porque quien está debajo sostiene el mundo”, o sea a nosotros los hombres, pobres desvalidos, que sin una mujer sumisa a nuestro lado nos perderíamos irremediablemente camino del infierno.
Así es amigas, la solidez de vuestros hombros sostiene hasta un elefante, decía uno de los antiguos profetas. Lo más estimulante es que el arzobispo de Granada, Javier Martínez, ha financiado la traducción del libro al castellano y su publicación en España con un precio de venta de 16 euros benditos. "Esposas, estad sujetas a vuestros maridos" habría afirmado San Pablo a los habitantes de Éfesos, según los escritos sagrados y citado muchas veces por contritos autores más modernos y no tan devotos historiadores. Según la prensa local andaluza que ha criticado duramente al arzobispo
Martínez, este habría comparado la Ley del Aborto y el régimen de Hitler, asegurando que “los crímenes nazis no eran tan repugnantes” como los que permite cometer la ley del aborto en España. Bueno, si el arzobispo, que ha abrazado la doctrina del amor predicada por Jesús sin excepciones, incluso por los pecadores, es capaz de expresarse así, no podemos dudar de su buena fe cuando se apresuró a que se publicara el libro de la señora Miriano.
Pero sigamos con alguna cita más de esta prodigiosa obra, inspirada seguramente por algún rayo divino, en esta ocasión benévolo.
“Si algo que él hace no te parece bien, con quien tienes que vértelas es con Dios”, porque “Dios te ha puesto al lado de tu marido, ese santo que te soporta a pesar de todo”. También aconseja sabiamente a sus amigas: “En caso de duda, sin embargo, obedece. Sométete con confianza”. Faltaba más. Y en otro pasaje, les dice: “Es verdad, todavía no eres una cocinera experimentada ni un ama de casa perfecta. ¿Qué problema hay si te lo dice? Dile que tiene razón, que es verdad, que aprenderás. Al ver tu dulzura y tu humildad, tu esfuerzo por convertirte, también él se convertirá”. Así es, tanto va el cántaro al agua que al final se rompe.
Bueno, como botón de muestra creo que basta. Según los que han han leído todo el libro los consejos son todos en este tono, sin pausa, en una demostración ejemplar de los deberes de la mujer con respecto a su familia, y en particular hacia su marido. En Italia se dice que lidera el récord de ventas. En un país como España, con unas 60-70 mujeres asesinadas por sus maridos o sus parejas cada año según cifras oficiales, estos sabios consejos seguramente que aplacarán a los lobos que se convertirán en corderitos apenas sus mujeres hayan leído la obra. Ah! Y no olvidéis de introducir el libro en las escuelas, así las niñas van aprendiendo cual es la conducta a seguir en el futuro. Les ahorrará una serie de golpes propinados por el rayo divino de la ira del santo .