Otro artillero hace su debut en Liverpool. Darwin "Huracán" Núñez

 

No acostumbro a escribir sobre temas deportivos. El fútbol sin embargo ha sido mi pasión en cuanto a los deportes que he practicado. Y por muchos años. Sin embargo no puedo dejar de emocionarme cuando los jugadores compatriotas se destacan, ya sea con la celeste o en sus clubes. Nombres legendarios desde las olimpíadas de Amsterdam y Colombes hace ya prácticamente un siglo, el mundial del '30 y luego el del '50, y los 15 títulos como campeón de América ameritan para que admiremos a las estrellas celestes, sobre todo a las que conocimos en vida como la de Forlán, Cavani, Suárez y decenas más. Hoy quiero resaltar sin embargo una nueva estrella de este deporte que brilló en el Benfica de Portugal y fue transferido al Liverpool inglés. 

Vi el partido en la final contra el Manchester City de Guardiola por la disputa del llamado Community Shield. Un partido de ida y vuelta en el primer tiempo, con más dominio territorial por momentos del City, pero donde el Liverpool ponía más en riesgo la valla de los celestes con algunos incisivos ataques, hasta que llegó el primer gol del Liverpool tras remate de de Alexander-Arnold ayudado por un leve desvío en un defensa del City. 

El partido siguió con la misma tónica, el City buscando el empate y los diablos rojos defendiendo bien y contraatacando y así llegó el final del primer tiempo. Ya antes de finalizar el primer período la TV muestra a Darwin haciendo ejercicios de calentamiento al costado de la cancha. Y en el minuto 58' del segundo tiempo entra al campo de juego en sustitución del brasileño Firmino de pálida actuación, ni un solo remate a los tres palos, solo uno y desviado. En esos minutos llega el empate del City en una jugada confusa donde el guardameta Adrián pierde la pelota tras un remate del rival, y un oportuno Alvarez, exjugador de River Plate argentino que también hacía su debut oficial, logra meter la pelota y el partido queda 1 a 1.

Y entonces empezó la ventolera, bueno el huracán. La primera pelota que recibe Darwin sale como una bala superando a la defensa y desafortunadamente adelanta demasiado el esférico (una vieja expresión de Carlos Solé)  dándole al guardameta Henderson la oportunidad de apresar la pelota al mismo tiempo que lo derriba en un claro penal, que no obstante no puede cobrarse porque era offside de Darwin.

A los pocos minutos otro ataque frontal del uruguayo, que supera una vez más en la carrera a la desesperada defensa celeste, y termina con un rebote en la cara del golero del City. Darwin estaba imparable y era una amenaza constante para la zaga del Manchester. Cuando el Liverpool con buenas combinaciones logra llegar a la zona de peligro, un centro desde la derecha le da la oportunidad a Darwin otra vez de imponerse a la pareja de zagueros rivales, cabeceando el balón que rebota en la mano de Rodrigo que lo marcaba. Penal y Mohammed Salah no perdona. 2 a 1. El partido sigue de ida y vuelto hasta que en los descuentos un centro cerrado y a media altura, es aprovechado por Darwin que en una palomita inesperada, cabecea la pelota desviándola para que se le cuele al sorprendido golero Henderson bajo el brazo. Es el sello de oro para Darwin y Liverpool. 

Mientras el otro depredador de las áreas es esperado hoy en Uruguay, el pistolero Luis Suárez,  después de haber inflado las redes con la camiseta también del Liverpool, Darwin Núñez inicia su etapa en la ciudad de los Beatles, con la fuerza de un huracán. Buena fortuna en este nuevo desafío y que con la celeste de Uruguay también el huracán se desate.