Vistas de página la semana pasada

sábado, 2 de marzo de 2024

Todavía hay un mañana

La creación cinematográfica siempre nos ofrece sus sorpresas. una de ellas es la recientemente entrenada  en Europa C´è ancora domani (Todavía hay un mañana) de la directora Paola Cortellesi, un relato llenos de emociones, nostalgias de una época y la lucha por sobrevivir a un opresivo y violento patriarcado en la Italia de la posguerra. 


La familia Ottorini.
Delia, la protagonista principal, interpretada por la propia Cortellesi, es "ama de casa", madre de dos hijos y una hija, Marcela, que tiene la ilusión de casarse pronto. La pareja de Delia es Ivano Ottorini, un temperamental y machista esposo, educado por un padre que le transmitió esos valores del patriarcado violento que, invariablemente, desembocan en palizas que para evitar la violencia misma como cruda realidad, Cortellesi hábilmente la convierte en pasos de danza o a puertas cerradas, mientras los hijos y las vecinas escuchan, lamentándose, el castigo desde la vecina plazoleta de la vivienda de los Ottorini. Impotentes, lamentan la suerte de Delia porque Ivano tiene el derecho reconocido culturalmente de golpear a su mujer, sin que la ley lo castigue. Es la realidad de aquella época, y no seamos hipócritas, la de hoy también en muchas sociedades, aunque en algunas la ley puede intervenir, pero no es una garantía.
La finalidad que persigue Cortellesi es poner en el centro del relato y al desnudo, la vida que vivieron generaciones de mujeres en una Italia arrasada por la guerra, ninguneadas por sus parejas, siempre tratadas como si fueran semiesclavas, silenciadas y golpeadas por un autoritarismo heredado, no solo por generaciones de hombres sin escrúpulos y violentos, sino por la propia esencia de la sociedad gobernada por más de dos décadas por el régimen fascista de Mussolini. 

Ante tanta atmósfera de opresión, Cortellesi antepone notas de humor en el desarrollo de la acción de la película y, sin piedad, pone al desnudo lo ridículo de la violencia machista de Ivano y su padre, un viejo que se ha pasado acostado en su lecho por años, simulando una enfermedad que no padece, para ser atendido y servido por Delia. 


Ella es incansable, cocina, lava la ropa de todos, limpia el hogar y corre para dar inyecciones a los enfermos del barrio, hace arreglos de ropa para una mercería, arma paraguas en un taller de reparaciones, y hace las compras en la feria y más. Los pocos ingresos que estas ocupaciones le dan es para aportar a la economía personal de Ivano que, no siempre, la agrega a la caja de latón donde se guardan los escasos recursos de la familia. El hombre juega a las cartas con amigos y tiene otros placeres que demandan dinero contante y sonante. Sin embargo, este acomplejado personaje, cuyo padre desde el trono de su cama  lo aconseja sobre el mejor método de tratar a su mujer: Ivano debe pegarle menos a menudo a su mujer, le aconseja el padre. La razón es que las mujeres se acostumbran a eso. Por el contrario, si lo hace menos veces pero con más violencia, como él hacia con la madre de Ivano, ella sabrá su lugar y no hablará, ni intervendrá tanto en los asuntos que solo pertenecen a los hombres. "Es una buena esposa, pero debe callar"-- dice el viejo.


Ivano es implacable, está convencido que Delia no hace nada, solo pierde el tiempo dando vueltas y él pretende tener un control estricto, sobre todo en los movimientos de Delia fuera del hogar. Ella por su parte, está obsesionada con el casamiento de Marcela y las exigencias que impone este paso, entre otras cosas un costoso traje de novia. Por eso, cada vez que sus trabajos le dan ingresos, saca una parte y la guarda para tal fin, sin que Ivano se entere. El novio de Marcela, que pertenece a una familia que es propietaria de un café, es un buen partido para la chica, ya que está socialmente por encima de los Ottorini.  


En esta compleja madeja de relaciones familiares y sociales, filmada en blanco y negro, y en la época de posguerra, la intención de Cortellesi es sin dudas homenajear a los maestros del neorrealismo de los ‘40 y ‘50 como De Sica, Visconti, Rosellini y otros directores que se destacaron por mostrar la miseria y grandeza de los protagonistas de aquella época, rompiendo con el cine patriótico de Mussolini y el alambicado de Hollywood, que gustaban a la gente en aquellos años. Ladrón de bicicletas, Roma, ciudad abierta, Dos mujeres, Bellissima, etc.etc. fueron parte de las películas que marcaron la grandeza del cine italiano de entonces.


Cortellesi ha realizado una gran película, millones de italianos han llenado las salas desde su estreno. Muchos y muchas recordarán las anécdotas de las abuelas y madres que vivieron esas vidas como si fueran aire, fantasmas que alimentaban a sus maridos e hijos, sin pedir nada para ellas, sumisas y obedientes. Sin embargo Delia, al final, logra un triunfo contra todo pronóstico, reivindicándola como ser humano para todos los que la rodean, a pesar de lo vivido y, sin dudas,  recuperando la grandeza de su existencia y derecho a ser respetada.


Si este espacio te parece interesante te agradezco que lo reenvíes a personas que se preocupan por estos temas, ya sea que estos sean tratados con un carácter serio o en tono humorístico. Las vergüenzas del poder también tienen su lado jocoso o muy serio cuando se desnudan por haber sido exhibidas descaradamente. Otros fenómenos sociales también cobran actualidad. O deja un comentario si deseas aportar una opinión sobre el tema. Aquí abajo hay posibilidades de hacerlo. Gracias por tu interés. Y suscríbete, es gratis.


1 comentario:


  1. El cine es un espejo de nuestra cruel o simple vida cotidiana.
    Este tema de una Italia post guerra, sus personajes viviendo una realidad que no fue benefactora para las mujeres.
    El trabajo, la sumisión, el maltrato y mantener económicamente a un parásito de marido, eran vida cotidiana para la mujer.
    Estas joyas cinematográficas, que denuncian las injusticias y la desigualdad nos da la pauta de nuestra evolución.
    Ahora Italia se encuentra en una involucion dado que tienen un gobierno fascista el cual nos da la pauta de su sociedad.
    Gracias por la reseña de una película la cual es digna de verla.

    ResponderEliminar

Le agradecemos su comentario referido al tema. Cada aporte es una gota de reflexión sobre temas que interesan o preocupan. Suscríbase si desea seguir leyendo las notas y relatos de este blog.Es gratis.