La Santa Inquisición contra Charlus Carrerus

La Santa Inquisición (SI) ha designado al inquisidor Giorgio Gandinulis para que sea el que promueva el juicio contra Charlus Carrerus por herejía y abuso de poder  al someter a una víctima a una ayuda humanitaria por causa de un flechazo lanzado desde el arco de un soldado que lo dejó parapléjico. La SI considera inadmisible que la víctima recibiera por décadas ayuda con dineros del tesoro del estado, a pesar de la responsabilidad en el fatal suceso de las autoridades entonces republicanas, pero hoy dependientes de la actual monarquía bajo el reinado del rey Ludovico Lacallus, con quien dialoga. Chismes y Rumores de fuente anónima recibió esta grabación.

Inquisidor GG: Debemos formar una comisión preinvestigadora en la Santa Orden de los Penitentes que velan por nuestros derechos. Los herejes de la secta progre Ampliar la Frente rehusan participar, pero peor para ellos. La bula del papa Inocencio IV caerá con todo el peso del reglamento de nuestro bendito Tomás de Torquemada.

Rey LL: Has hecho un trabajo envidiable, hijo mío. Seguro que Torquemada en el cielo estará orgulloso de ti y tu ambición de hacer justicia contra la herejía de la ayuda humanitaria generosa. Ese Charlus Carrerus sobrepasó todos los límites que la SI admite en cuanto ayuda humanitaria. Hay que ver nomás cómo nosotros le estamos administrando la comida a los humildes para darse cuenta de que tenemos nuestras limitaciones en el presupuesto. Los señores feudales no quieren saber nada de gastos exuberantes que perjudiquen sus intereses... tu sabes a lo que me refiero.

Inquisidor GG: Por supuesto, por supuesto. Es hora de darles una lección a estos herejes que creen que pueden meter la mano en la bolsa de nuestra nobleza, quienes son además los que mantienen a nuestra monarquía con sus aportes voluntarios. Faltaba más, decía mi abuelo. Bueno, el plan es formar la Comisión Prenvestigadora y para eso tendré que convencer a la Gran Doncella de todos los Mártires, doña Argimonius, para que dé el visto bueno, algo con lo que contamos si es que no le entra el tembleque a última hora.

Rey LL: Non preocuparum. Todo está bien cocinado en nuestras ollas del palacio. A propósito, el potro es el tormento más adecuado para este hereje de Charlus Carrerus, así que no escatimen esfuerzos en usarlo. Quiero una confesión de cabo a rabo. Se hacreído que bajo la República todo era posible con tal de redistribuir la riqueza que por suerte se la estamos devolviendo a nuestra nobleza de oro y a las Compañías de las Indias Occidentales. Además es hora de sacar los focos en mi escudero Alexandrus Astesianus que exageró su generosidad de otorgar salvoconductos a los Ivanes que tanto buscan ayudarnos con inversiones fuera de toda sospecha, y de aquél otro zagal, Sebastianus Marzélus, empeñado en dirigir un próspero comercio a través de nuestro querido puerto. El diario El Paisito ya puso en marcha la campaña con gruesos titulares en primera plana.

Inquisidor GG: No hablemos más. Estas cosas se graban en micrófonos ocultos y después nos acusan de barbaridades como si estuviéramos en la época feudal. Pasemos al confesionario donde estamos más seguros, ya que todos los días es repasado con la última tecnología para descubrir micrófonos que no son oficiales. Además querido monarca, debo decirte que estoy pensando cambiar de cofradía y pasarme a la tuya que tanto éxito ha tenido. Claro que dejo la puerta entreabierta por las dudas de que me toque volver al redil si me lo piden los otros miembros. 

Rey LL: Te agradezco el gesto, pero no dejes la función de inquisidor que tanto beneficio nos está dando. Desde ahí harás más daño de lo que te imaginas. Además siempre fuiste lambeculo del obispo Larragnagus, y mejor estar juntos pero no revueltos. De las puñaladas traperas de los amigos hay que estar en guardia siempre, me advertía mi abuelito, el gran Ludovico Herrerus. Tamo?